esclavo del trabajo

convocatoria al concurso nacional de escultura en clip

Un día cualquiera de trabajo habitual, me interrumpió una señora que difícilmente me dirige la palabra en el trabajo, para darme la aterradora noticia de que se realizaría limpieza profunda en los cubículos, lo cual orilla al ocupante de cada cubículo a realizar una depuración de lo que sirve y de lo que no.... sabemos como chingados llegó ahí ni mucho menos que función tiene pero ahí esta.



Al darme cuenta de lo que representaba esto me surgió la curiosidad de saber lo que el lado oscuro de mi vecino ocultaba mi sorpresa fue encontrar este artefacto, que según me dice sirve para abrir los cajones de su escritorio.

La neta no le creo pienso que es un artesangano infiltrado que llego a este lugar buscando una fuente de inspiración, y como no quiero quedarme atrás realice mi propia escultura en clip y yo si la voy a presumir.

Quien dijo que el arte no es funcional

me siguen sorprendiendo

nada que hacer?

Me pregunto que motiva a un jefe para maquinar una serie de tareas que requieren una actividad mental sin precedentes y una solución inmediata.

El resultado de esta actividad neuronal lo orilla a cumplir con la premisa de que mantener al personal activo es señal de ser un buen jefe.

De esto se desprenden las siguientes actividades: rayar la parte usada de la hojas recicladas, contar las paginas de un contrato, hacer una tabla en excel de números que algún día fueron de gran importancia, y que ahora sus expedientes solo sirven como contenedores de polvo, ha....... pero por si las recochinas dudas se pueden volver a ocupar. Y la mejor de todas estas tareas es la que te otorga status, revisar minuciosamente operaciones matemáticas de un contrato que tuvo a bien concluir cuando lo estas trabajando dada su irrelevancia.

lo peor es que ya le estoy tomando gusto al rayado de hojas; ha pero ahora para que se chinguen las voy a rayar mal........... ja

Porque cuando me encuentro trabajando el tiempo es más relativo de lo normal siempre existe la pinche vieja (secretaria prepotente) que se encuentra hablando por teléfono por "un momento", a quien necesitas abordar literalmente para conseguir un poco de atención, y acepte un documento, mientras discute la inaplazable tarea de elegir el color del disfraz de !jorgito!

He aquí algunas frases que confirman mi teoría "alrato te lo paso" "no me tardo" "voy al baño" "te ando buscando desde hace un rato" "te lo traigo mañana"

¿Existe un universo paralelo donde se pierden las personas cuando tienen todas las intenciones de llevar acabo una acción? ¿por que nadie me hizo el favor de avisarme?.

Me despido "al rato nos leemos" ¿o no?